Lun. Nov 4th, 2024

La plaga de chinches fue erradicada hace 50 años en España. Sin embargo, este insecto se reintrodujo en nuestro país hace unos 10 años aproximadamente, debido al aumento del tránsito de personas.

Aunque se suele asociar la presencia de las chinches con la falta de higiene, los expertos afirman que no existe ninguna relación entre ambos. De hecho, esta plaga se ha convertido en un verdadero problema sanitario en países desarrollados como Estados Unidos o Australia.

Este insecto viaja junto con los turistas y se introduce en hoteles, albergues, transporte público e, incluso, en colegios, guarderías, residencias de ancianos u hospitales. Una vez instaladas, las chinches se cuelan en pequeños resquicios de puertas, muebles, camas, almohadas, somieres, armarios, sofás, sillas… Prácticamente ningún lugar está libre de ser invadido por esta plaga.

En España las chinches no transmiten enfermedades, a diferencia de lo que ocurre en otros países, pero producen unas picaduras muy molestas, ya que alimentan de la sangre humana, y pueden causar reacciones alérgicas.

Una vez que se han instalado en un lugar son muy difíciles de erradicar y de controlar, puesto que son insectos muy resistentes que pueden llegar a vivir un año sin alimentarse y soportan temperaturas extremas, tanto frías como cálidas (hasta los 45ºC).

De ahí que cuando se detectan sea preciso contactar con especialistas en control de plagas en madrid (aquí), que estudiarán la situación y utilizarán el sistema para la eliminación de chinches más conveniente en cada caso.

Habitualmente las empresas utilizan métodos combinados, lo que se conoce como “manejo integrado de plagas”, con el objetivo de conseguir resultados eficaces al tiempo que se cuida el medioambiente y la salud de las personas.

Se emplean pesticidas químicos que no son aptos para uso doméstico, aunque siempre en la menor cantidad posible y en combinación con métodos alternativos como calor seco, calor húmedo (vapor), frío o aspiración, entre otros.

Previamente a la aplicación de cualquier sistema de erradicación de plagas es preciso lavar las sábanas, colchas, mantas, cortinas, y ropa a una temperatura no inferior a los 60ºC. Si se ha detectado la presencia de chinches después de volver de un viaje, también habrá que revisar las maletas.

Puesto que las chinches suelen anidar en los colchones, como medida preventiva es conveniente utilizar fundas transpirables que permitan proteger las camas de forma segura.

Detectar su presencia es sencillo. Son insectos nocturnos de color óxido, con seis patas y un cuerpo ovalado del tamaño de una pepita de manzana aproximadamente. Su picadura deja pequeñas marcas rojas, habitualmente en los brazos y el cuello, con muy poca separación entre ellas.

El sistema para la eliminación de chinches puede variar según la gravedad de la situación pero nunca es suficiente con un simple insecticida doméstico.

Si se observa su presencia o se sospecha que puedan haber invadido un lugar o su casa, lo más aconsejable es recurrir a una empresa especializada y profesional que conozca los mejores métodos y productos que puedan erradicar radicalmente con la plaga de chinches de forma segura sin afectar de forma nociva al medio-ambiente.